El presidente, Gustavo Petro, dijo que Europa mira hoy los faros de la democracia en América Latina, e hizo votos porque ese faro no se apague.

Petro encabezó la celebración de los 90 años del bogotano Liceo Francés Louis Pasteur, al que entregó la Orden de Boyacá, por sus aportes a la formación cultural y a las relaciones entre Colombia y Francia.

“Ya no somos nosotros los que miramos los faros de la democracia en Europa… Ahora allá nos miran a nosotros”, expresó el mandatario, quien se refirió al origen de la democracia y a las ideas compartidas por jóvenes en la Revolución Francesa y la Independencia de América.

“Ese faro de la democracia no se puede apagar”, dijo, y reiteró que América Latina hace varias décadas miraba con admiración las ideas de Europa y ahora ocurre a la inversa.

Petro recordó que hace varias décadas los jóvenes veían con admiración a François Mitterrand (1981-95), primer presidente socialista de Francia, y ahora sucede en América Latina.

El mandatario dijo que, actualmente, América Latina tiene presidentes de esa tendencia como el de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; Chile, Gabriel Boric; México, Andrés Manuel López Obrador, y él mismo.

“Ya no somos nosotros los que miramos los faros de la democracia en Europa. Mitterrand era nuestro héroe (…)  Ahora allá nos miran a nosotros. ¿Qué va a hacer Boric? ¿Qué va a hacer Lula? ¿Cómo actuará López Obrador y cómo se va a poder mover Petro en el mundo?”, reseñó.

Se refirió al origen de la democracia y a las ideas compartidas por jóvenes en la Revolución Francesa y la Independencia de América, y habló de los valores de libertad, igualdad, y fraternidad propugnados por aquella.

“Eso que llaman ahora valores democráticos no siempre han permanecido entre nosotros. Nos hemos alejado a través de estos dos siglos y medio, una y otra vez de ellos”, les dijo a los asistentes en el aula máxima del plantel. “Si uno mira el mundo de hoy, las bombas de Gaza no solamente matan niños y niñas por miles, matan precisamente la libertad, matan precisamente la igualdad humana, matan precisamente la solidaridad”.

Y preguntó: “¿cómo puede haber solidaridad cuando una bomba hecha por hombres mata niños y niñas?

“Eso que hoy pasa y ha pasado, no hace mucho pasó en Guernica, España, País Vasco; pasó en las tierras centroamericanas, pasó en nuestro país una y otra vez, Colombia, y en muchísimas otras partes del mundo. Es en realidad una lucha que no ha cesado. No se triunfó allá en la Bastilla, no se triunfó acá en la batalla de Boyacá, no se ha triunfado aún”, puntualizó.

Al destacar los aportes del liceo al país, Petro indicó que “aquí se cría una especie de vanguardia del intelecto”, y resaltó que “ser vanguardia es siempre indispensable, porque si no, la humanidad se quedaría atrás”.

Durante el acto, el jefe de Estado le entregó a la institución la Orden de Boyacá, en el grado de Cruz de Plata, otorgada por el Gobierno Nacional en reconocimiento a sus aportes a la formación de los jóvenes y la relación entre Colombia y Francia.

El Liceo Francés “ha contribuido a la formación bicultural de los colombianos y los franco-colombianos, ligando la identidad colombiana de sus alumnos con la promoción de la cultura francesa” y “ha impulsado la formación con pensamiento crítico y la creatividad”, destaca el decreto por el que se confiere la distinción.

“Sus exalumnos se destacan en diversas áreas en todo el mundo, tales como la docencia, la investigación, las artes, la administración, el liderazgo del Estado y de empresas nacionales e internacionales”, agrega.

En la ceremonia estuvieron la primera dama de la Nación, Verónica Alcocer; el embajador de la República Francesa en Colombia, Frédéric Doré; el rector de la institución, Maxime Prieto; el Jefe del Sector de las Américas de la Agencia para la Enseñanza Francesa en el Extranjero (AEFE), Regis Rafaust; directivos, profesores, alumnos y exalumnos del colegio.

El Liceo Francés fue creado en 1934 por un grupo liderado por José de la Vega, quien fundó el diario El Siglo, de Bogotá, en compañía de Laureano Gómez, más tarde presidente de la República.

Originalmente se conoció como Liceo Francés de Bogotá, con 35 alumnos.

En 1943, tomó el nombre de Liceo Francés Louis Pasteur, en memoria del químico, físico y bacteriólogo francés. Cuatro años más tarde se inició la construcción de su sede definitiva en el barrio La Cabrera, con capacidad inicial para 800 estudiantes, que luego se amplió a 1.000 y más tarde a más de 1.800.

El Liceo recibió las visitas de dos jefes de Estado de Francia, en 1964 el general Charles de Gaulle, y en 1985 François Mitterrand.

En 2014, el centro académico fue distinguido con la Orden Nacional al Mérito.